Otoplastia

La cirugía de orejas, también llamada otoplastia, es un tratamiento estético muy sencillo con el que se puede corregir diferentes imperfecciones del aspecto de las mismas. En este procedimiento se puede modificar la forma, el tamaño o el ángulo que forman las orejas en relación con la sien.

Muchas personas buscan someterse a este tratamiento estético, para corregir el trastorno llamado orejas en asa, es decir, cuando las mismas se encuentran con una separación muy grande de la cabeza. Como las orejas suelen crecer completamente a los 4 años de edad, esta cirugía puede realizarse a partir de dicha edad sin sufrir ninguna consecuencia si la decisión se toma cuando se llega a la adultez.

¿Quiénes son candidatos a la otoplastia?

Cualquier persona es apta para someterse a dicha cirugía si no se encuentra a gusto con la apariencia de sus orejas, siendo importante seguir los consejos y las instrucciones de los especialistas, especialmente si se piensa realizar la otoplastia en niños. En estos casos, es probable que se recomiende estar atento a las reacciones del pequeño con respecto a sus orejas ya que, los chicos que se quejan de esta parte de su cuerpo son quienes más cooperan durante la cirugía y quienes quedarán más satisfechos con los resultados.

En este tratamiento quirúrgico estético, no existen riesgos ni efectos secundarios; sin embargo, como cualquier intervención, pueden haber algunos factores a tener en cuenta como la aparición de algún hematoma en la zona o una infección, aunque se trata de una cantidad de casos muy reducidos.